En el juego de la atracción esta es una postura, por lo menos, peligrosa
La esposa, por poner un ejemplo, puede gozar de manera espontánea una actividad escogida por ella (adquirir un juguete, por ejemplo)… al tiempo que él (aunque no le interesen los juguetes, o deteste ir de tiendas) va a tratar de gozar del placer que esta actividad porporciona a su mujer.