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Considera la posibilidad de castigar a tu sumiso ante otras personas. El castigo público, por suaves que sean los golpes, puede resultar más degradante y duro para el sumiso que un castigo privado más duro.

Debo cumplir con mi misión y regresar al Cielo. Pronto te contaré más secretos a fin de que puedas resolver tus inconvenientes de pareja y, conocer más sobre mi experiencia, el devenir de mi viaje después de mi muerte.

Estaría excelente que vieras mis videos para hacerte una idea más precisa de como soy, al menos me veras en movimiento.

Escriba un post sobre ligar con guiris. Publíquelo. Deje que se conozca, y sostenga cierto suspense sobre la persona que ha escrito el post sobre ligar con guiris. Actúe con plena naturalidad y genere curiosidad. Usted va a estar ahí para satisfacerla… verdad de la buena.

La prakriti, es la ‘esencia primordial’. Es el principio femenino traducido a veces como Naturaleza, a partir de la cual evolucionan las próximas 23 entidades: Antah Karana, la mente. Buddhi, inteligencia, lo más puro y sublime de la mente.

La mujer se acuesta boca arriba, y el hombre se arrodilla y entra con ella, agarrando firmemente sus tobillos y abriendo las piernas lo más que pueda. Querrá experimentar con la amplitud y el ritmo de empuje más agradables, ya que las sensaciones pueden variar bastante.

Abre la postura de tu cuerpo en su dirección. Caballeros, crucen sus brazos y piernas y abran su cuerpo para que parezcan accesibles. Mujeres, ¿llevas bragas? ¡Ser valiente! ¿Qué puedes hacer para demostrar que estás realmente disponible?

Quizás debamos reaprender esta gran enseñanza. Muchas parejas que cuentan con la permisividad de la desnudez, de la privacidad y del total contacto no son capaces de sentir lo que otros logran con inocentes besos.

Las consideraciones hechas hasta aquí referidas a los Vedas son extendidas por los tantrikas a los Tantras o Agamas, fundándose en que son una expresión esotérica de los primeros adecuada a la comprensión de los hombres que recorren por el presente KaliYuga.

Cabe nombrar que incluso cuando en determinadas frases pudiere parecer que se habla específicamente de un hombre o bien una mujer, la situación de ser infiel, no es privativa ni mayoritaria de un género particularmente.